Me sorprende la ironía de las emociones.
Son fugaces, espontáneas. Cuando las vivimos, creemos que durarán para siempre. Seguir leyendo Exagerar antes que controlar
Me sorprende la ironía de las emociones.
Son fugaces, espontáneas. Cuando las vivimos, creemos que durarán para siempre. Seguir leyendo Exagerar antes que controlar
Si yo fuera mi paciente, ¿qué me diría?
Es una frase que me ayuda a orientarme en momentos en los que dudo, tengo miedo o me juzgo.
Cuando paso por un momento en el que me gana mi humanidad y me da por ser severo conmigo…
… la idea del primer renglón me pone freno de mano.
Hay un tema que desde la semana pasada me deja pensando:
Por qué es tan difícil a veces decir la verdad.
Existe una tendencia a omitir, evadir, endulzar o no tocar ciertos temas que en el fondo sentimos que nos aligeraría expresar. Seguir leyendo Las 5 verdades
“No quiero perderla”, “no quiero perderlo”.
Eso pienso, eso siento, eso escucho, eso vivo.
El viernes desayunaba con una amiga y le comentaba de mis miedos y deseos en una relación de pareja.
Ella me preguntó cuál consideraba que era el mayor obstáculo en una relación de pareja.
Le contesté:
-El miedo a la pérdida.
-Ése no es un tema de pareja… Ése es un tema tuyo.
Reciente mente leí una definición de ‘felicidad” que me pareció muy integral.
Felicidad es un equilibrio entre:
PLACER y PROPÓSITO.
Placer supone lo que nos hace sentir bien en este momento, por ejemplo fumar, ver televisión o comer golosinas.
Propósito implica experiencias que en sí no resultan gratificantes, pero que durante su ejecución o al concluirlas, dejan un regusto de satisfacción, como hacer limpieza, cuidar a un hijo.
La mezcla de ambos sectores genera la felicidad.