¿Cómo dejar de abrumarme?
Se me ocurrió esta pregunta, porque pasmarme y llenarme de pensamientos que me impiden tomar acción es una experiencia más cotidiana de lo que quisiera.
Hace unos meses obtuve una estrategia que no había definido como respuesta a esa pregunta y la aclaré al subir la pared de la foto, pared que al verla me parecía intimidante.
Vuelvo a la pregunta: “¿Cómo dejar de abrumarme?”, es más, parto la pregunta en preguntitas:
¿Cómo logro ir más allá de ensayar el fracaso una y otra vez en mi cabeza?
¿Cómo dejar de complacer las expectativas que creo, y que a lo mejor ni tienen, las personas de mí?
¿Cómo ir más lejos de lo que parece una tarea larguísima o complicada?
¿Cómo soltar mis fantasmas del pasado y mis cicatrices, más emocionales que físicas?
¿Cómo moverme con la curiosidad de un niño que juega, en vez de con la parálisis de un anciano que teme caerse y hacerse pedacitos? Seguir leyendo Cómo dejar de abrumarme
La “vocecita” o “vocesota” que tiende a juzgarme, criticarme o meterme miedo en mi cabeza me dice que lo que estoy apunto de escribir es: cursi, esúpido e incluso ridículo…